¿Por qué no cuidamos suficiente la vida?

¿Por qué esperamos a que el dolor sea insoportable para acudir al médico? ¿Por qué conducimos sin cinturón de seguridad? ¿Por qué contestamos el celular mientras conducimos? Estos son solo pequeños ejemplos de formas comunes en las ponemos en riesgo nuestra vida.

Conocemos las consecuencias que estas acciones pueden provocar, sin embargo, a veces solo pensamos que no nos va a pasar a nosotros, que podemos soportar un poco más el dolor, que conducimos mejor que los demás y no nos pasará nada.

Muchos de estos riesgos terminan en una muerte inesperada y que podía haberse evitado.

Según el Instituto de Métricas y Evaluación de la Salud de Estados Unidos, el 32% de muertes de la población mundial se debe a las enfermedades cardiovasculares. Estas también representan la principal causa de muerte de los ecuatorianos, según el Instituto Nacional de Estadísticas y Censo (INEC). Según especialistas, gran parte de estos padecimientos pueden ser prevenidos con dieta saludable y ejercicio cotidiano.

Por otra parte, cada año 1,3 millones de personas pierden la vida a causa de accidentes de tránsito en el mundo, según cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS). En Ecuador hasta noviembre del 2018, se registraron 1 950 fallecidos por accidentes de tránsito y es considerada la sexta causa de muerte en nuestro país; el motivo principal de estos accidentes es el uso del celular. Estas cifras podrían cambiar con uso prudente del celular y la atención a las señales de tránsito.

Muchos de los riesgos a los que nos exponemos nos parecen menores, pero pueden tener consecuencias importantes. Miremos la vida como un regalo hermoso que tenemos la responsabilidad de cuidar por nuestro bien y el de los que amamos. ¡Tu vida es importante!