¿Cómo educar a los niños con inteligencia emocional?
Los niños y su inteligencia emocional.
Las emociones son un mundo que habita en nuestro interior desde que existimos. No son negativas, sin embargo, requieren un manejo adecuado que solo puede alcanzarse a través de la inteligencia emocional. Esta nos brinda la capacidad para usar nuestras emociones en la resolución de problemas.
La Psicóloga educativa Diana Vítores nos comenta que es un aprendizaje que se da toda la vida, por esta razón es muy importante que empiece desde pequeños. Actualmente, es coordinadora del Departamento de Consejería Estudiantil en el Centro Educativo La Moderna y desde su experiencia de 25 años con niños nos recalca que la educación emocional empieza en casa: «el adulto sirve de modelo, no se enseña en un ámbito formal de educación, se aprende en la convivencia y los niños la adquieren observando el comportamiento de sus padres».
Vítores nos da 5 aspectos a tener en cuenta en los padres para llegar a desarrollar la inteligencia emocional y luego inculcarla en los niños a través del ejemplo:
- Conocimiento personal. Reconocer las propias emociones y el origen de estas. La única manera de aprender a manejarlas es saber qué las origina.
- Contención emocional. Es la capacidad de manejar las propias emociones. Por ejemplo, cuando estamos frente a una situación estresante, regular la intensidad de la emoción sin dejar de sentirla.
- Capacidad de empatía. Identificar las emociones del otro, esto nos lleva a entenderlo y saber qué debemos hacer y qué no debemos hacer para encender aún más esa emoción o apagarla. Solo se puede considerar en el otro cuando podemos hacerlo en nosotros mismos.
- Contener las emociones del otro. Así podrá brindar estabilidad a los demás y ayudar a que puedan regular lo que sienten.
- Capacidad de resiliencia. Según Vítores, esta es la máxima capacidad de la inteligencia emocional, ya que, a pesar de que la situación es muy grave o seria, los aspectos anteriores facultan al ser humano a superar la adversidad y salir fortalecido de ella. En este aspecto se trata de que la persona encuentre la certeza de que más allá del mal que está ocurriendo, puede encontrarle un sentido.
Según la especialista, desde que son muy pequeños se puede empezar a educar en dos temas fundamentales: los límites y las jerarquías. El niño debe aprender que es parte de una sociedad, por lo tanto, hay roles, reglas y límites para su comportamiento, «no puedo ser libre a costa del sufrimiento o molestia de otro».
Un padre de familia que ha trabajado los 5 aspectos detallados anteriormente va a poder comprender a su hijo y darle el debido acompañamiento cuando sienta miedo, frustración o angustia.
¿Qué beneficios tiene la inteligencia emocional?
La psicóloga nos manifiesta que un niño que desde pequeño ha sido educado en el manejo de sus emociones, será capaz superar las crisis con alto nivel de resiliencia, puede vivir situaciones incomodas o frustrantes, sin embargo, las afrontará con esperanza, proactividad y serenidad. Se convertirá en un adulto que puede contagiar ese entusiasmo y dar soporte a otros.