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¿Por qué anticiparnos?

 ¿Por qué anticiparnos?

Hablar sobre la pérdida de un ser querido es un tema difícil de abordar, nadie quiere conversar sobre esto antes de que sea necesario. Sin embargo, es un hecho inevitable y que trae consigo visitas al cementerio, trámites en la funeraria y decidir algunas opciones sobre la despedida al ser amado.

 

Este tipo de diligencias pueden causar angustia o estrés cuando hay que tomarlas en un momento tan doloroso. Por eso, desde los inicios de Jardines de Esperanza, nos preocupamos por fomentar una cultura de prevención para darle tranquilidad a las familias ante un suceso tan lamentable.

 

Empezamos nuestra labor hace 43 años, en un entorno donde no se preveía sobre la muerte, sino que solo se compraban servicios funerarios en emergencia. Sin embargo, teníamos claro el objetivo: dar protección y tranquilidad a las familias.

 

Así es como empezamos a ofrecer nuestros servicios. La primera persona en confiar en nuestra visión fue Julio Oviedo, hombre emprendedor y con gran visión para los negocios. Al recibir la visita de uno de nuestros asesores adquirió un plan para él y toda su familia, de esta manera les brindo la seguridad de que estarían cubiertos al momento de la emergencia.

 

Siempre es mejor anticiparnos

Su hija, Esther Oviedo nos expresó su agradecimiento por la atención recibida:

 

«Agradecemos que hayan estimulado la compra que mi papá hizo aquí, como comprador número uno. Estoy muy satisfecha y agradecida con la atención que nos han dado. A pesar del dolor que siento, estoy agradecida de que mi papá lo haya adquirido con anticipación».

 

Sus familiares agradecieron la previsión que tuvo su padre en contratar este plan y otra de sus hijas, Martha Oviedo, lo recomienda a más familias:

 

«Pudimos hacer uso del plan con mi mamá, ahora lo hacemos con mi papá. Los dos están en el mismo lugar. Yo recomiendo este servicio para que seamos previsores, a nadie le gusta pensar en la muerte, pero va a llegar y lo mejor es no dejar ninguna dificultad a la familia que queda».